- Conecta los equipos a una regleta con botón de apagado. Cuando no los vayas a utilizar por un largo periodo desconecta la regleta.

-Evita los "vampiros energéticos". Los dispositivos que una vez apagados utilizan energía para alimentar diversas aplicaciones como la hora, apagalos cuando dejes de utilizarlos.

-Busca equipos certificados en ahorro energético. Sobre todo televisores y aparatos con uso más intensivo.

-Los ordenadores portátiles utilizan menos energía que los fijos.

-Configura el ordenador para hibernar o dormir. Utiliza mucha menos energía que cuando salta el salvapantallas.

-Desconecta los cargadores de batería. Cuando la batería este llena desconecta el cargador, muchos de ellos siguen consumiendo energía aunque no esten cargando nada.